EPIFANIA DO SEÑOR
El término Epifanía puede ser entendido para traducir el concepto de "gloria de Dios" que indica las huellas de su paso o, más simplemente, su presencia. En el
Nuevo Testamento, en las
cartas paulinas tardías, se refiere a la entrada de
Cristo en el mundo, presentada como la del emperador que viene a tomar posesión de su reino (latín: adventus, de ahí el tiempo de Adviento como preparación a la Navidad). A partir de este significado, el término se usó en Oriente para indicar la manifestación de Cristo en la carne y a continuación, a partir del
siglo IX, para designar la fiesta de la revelación de Jesús al mundo pagano. Esta es la fiesta que se sigue celebrando el día 6 de enero.
En la narración de la
Biblia Jesús se dio a conocer a diferentes personas y en diferentes momentos, pero el mundo cristiano celebra como epifanías tres eventos, a saber:
En realidad la fiesta de epifanía que más se celebra es la que corresponde al día 6 de enero de cada año en la que los tres
magos, según la tradición (en las traducciones de
Biblias protestantes, y ya actualmente en las últimas traducciones de las biblias católicas, elaboradas en colaboración
ecuménica e interconfesional, se menciona el adjetivo
sabios) denominados:
Gaspar,
Melchor y
Baltasar que aparecen del oriente para
adorar la primera
manifestación de
Jesús como niño ofreciendo tres regalos simbólicos:
oro,
incienso y
mirra. En realidad, la Biblia no habla del número de los magos, o sabios, ni tampoco de sus nombres. Ha sido la tradición posterior la que ha identificado su número y nombres. Los restos de los magos descansan en la
Catedral de Colonia en
Alemania.
Orígenes
La Epifanía es una de las fiestas litúrgicas católicas más antiguas, más aún que la misma
Navidad. En
Egipto y
Arabia se celebraba el
solsticio de invierno en el año
361.
En el
siglo XV existía en
Florencia la
Compagnia dei Magi o
Compagnia della Stella, una de las congregaciones más importantes de la ciudad, protegida por los
Médici, que tenían una particular devoción por los Magos (les dedicaron la
Cappella dei Magi en su palacio -con frescos de
Benozzo Gozzoli- y la
Adoración de los Magos de
Fra Angelico en la capilla de Cosme el Viejo en el convento de San Marcos). Esta hermandad imitaba cada tres años (desde 1447 cada cinco) el viaje de los Reyes Magos por las calles de
Florencia, uno de los festejos más suntuosos de la ciudad toscana.
Día de los Reyes Magos
En algunos países este día es tradicional hacer regalos a los niños conmemorando los presentes que los Magos llevaron al
Niño Jesús, según cuenta el evangelio de
San Mateo. Este
evangelio menciona que unos
Magos siguieron una brillante
estrella para adorar y llevar regalos al Niño Jesús.
Costumbres por región
España
En España, la tradición es que los niños escriban una carta a los
Magos y que se envía días antes del día de Epifanía. En este día, popularmente conocido como
Día de Reyes o Noche de Reyes (de la noche del 5 de enero al día 6 de enero) se consume el deseado
roscón de reyes que contiene un haba, desde antiguo (esta tradición puede remontarse a la época romana) el que la encontraba era el rey de la reunión (ver Baroja, Caro: "El Carnaval"), aunque en la actualidad se coloca una sorpresa en forma de figurilla que también corresponde al coronado, castigando al que recibe el haba a pagar el roscón.
En muchos lugares es también tradición dejarles algo de comer y beber (normalmente algún licor o vino, y dulces) a los Reyes Magos y a sus camellos. Los platos al día siguiente aparecen vacíos, y en su lugar aparecen los regalos.
El día anterior se realiza una
cabalgata de Reyes Magos en diferentes lugares y ciudades de
España donde aparecen los magos con los regalos que durante esa noche ofrecerán a los niños.
En algunos lugares es tradición, antes de irse a dormir, colocar un zapato de cada persona de la casa en fila, y los reyes ponen los regalos de cada uno junto al zapato correspondiente.